[Date Prev][Date Next][Thread Prev][Thread Next][Date Index][Thread Index]

[escepticos] Carta a Manuel Carballal



Hola,

a propósito del enlace que ayer mandó VONBRAUN sobre el artículo en contra 
de ARP, he decidido responder a Manuel Carballal, por supuesto a título 
personal. Sólo me he referido en la carta al anexo en el que describe la 
captación de adeptos a través de Internet, por lo que me toca. 

Saludos,

David de Cos



------------------------------------------------------


Estimado señor Carballal,

he tenido ocasión recientemente de leer en la página web a cuya redacción
escribo el artículo de título: "ARP: El gran fraude de los escépticos",
firmado por usted. No soy miembro de ARP ni tengo relación ninguna con esta
asociación, y por lo tanto no voy a pronunciarme acerca del artículo
original, pero sí me gustaría realizar algunos apuntes sobre el anexo del
mismo, titulado "Y luego llegó Internet...". Lo hago porque pertenezco a
una lista de correo de temática escéptica y ocasionalmente visito alguno de
los canales de IRC a los que usted alude, y, aunque no tengo costumbre de
visitar las páginas de Play Boy mientras lo hago, creo que bien puedo ser
una de esas personas de las que usted pronostica que nuestra seducción por
el escepticismo se nos pasará con la madurez.

Básicamente, el motivo de esta carta es decirle que no he recibido con
demasiada sorpresa algunos de los hechos que usted relata en el citado
anexo. Puedo entender por motivos obvios, por ejemplo, que usted prefiera
que yo gaste mi dinero y mi tiempo en comprar y leer la revista "Más Allá"
antes que en la revista "El Escéptico", o en recibir gratuitamente "El
Escéptico Digital". Es comprensible.

Por otro lado, tampoco me parece inaudito que usted tenga la impresión de
no haber sido tratado con corrección por algunos escépticos en aquellas
ocasiones en las que ha intentado discutir con ellos acerca de fenómenos
paranormales. No creo haber tenido la oportunidad de presenciar las
situaciones que usted describe, pero ya le digo que puedo creérmelo. Sin
embargo, también creo que puedo figurarme las causas de ello, y me gustaría
compartir con usted esas impresiones a fin de ayudarle a ser más
comprensivo la próxima vez que esto ocurra.

En primer lugar, debe tratar de entender que para discutir sobre algo es
recomendable tener conocimientos sobre ese algo; y que usted discuta sobre
Ciencia con un científico es exactamente igual que si yo me atrevo a
discutir sobre Música con un director de orquesta, sobre Derecho con un
juez o sobre salvamento marítimo con un guardacostas. Partiendo de ese
hecho, es la actitud que uno mantiene al conversar lo que puede determinar
fundamentalmente la reacción del otro. Así, soy capaz perfectamente de
imaginarme la contrariedad de ese juez si yo, en lugar de intentar
aprovechar la oportunidad de aprender de sus conocimientos, hago
afirmaciones sobre Derecho completamente absurdas y exijo que sean
tratadas con la misma consideración que las que él realiza. Imagínese la
situación. Convendrá conmigo en que, si ese juez no es un auténtico pedazo
de pan, será casi inevitable que la vehemencia se apodere de él. De la
misma manera, un científico no es siempre capaz de mantener la calma cuando
alguien, como por ejemplo usted, pretende que el desconocimiento sea un
arma equiparable a la razón en un asunto científico, y se adentra
(valientemente, hay que reconocerlo) en una discusión sobre Ciencia
blandiendo ese arma. Entiéndalo, somos humanos. Por eso digo que me parece
comprensible lo que usted relata.

Por otro lado, se me ocurre una explicación alternativa a su contrariedad,
en caso de que la anterior no le haya satisfecho: quizá lo que ha ocurrido
es que, en las citadas discusiones, usted simplemente haya recibido
argumentos poderosos en contra de sus descabelladas afirmaciones, no haya
sido capaz de admitir su error y su reacción sea acusar a sus oponentes de
falta de educación o de cualquier otra cosa. Tampoco me parecería
increíble, y, por suerte, eso sí que se pasa con la madurez.

En cualquier caso, sea una u otra la explicación de los hechos que relata,
me gustaría finalizar esta carta invitándole a que vuelva a intentar
participar en las listas de correo o canales del IRC de temática escéptica
en los que dice no ser tratado con corrección, pero esta vez con el
inocente y natural objetivo de escuchar a quien sabe más que usted, y por
supuesto enseñar a quien sabe menos. Personalmente le puedo asegurar que,
si consigue aprender la mitad de lo que he aprendido yo, será afortunado y
sin duda quedará agradecido de los conocimientos que los demás ponen
desinteresadamente a su disposición, y de la misma manera nosotros lo
estaremos también por lo que usted pueda enseñarnos. Pienso además que
estos nuevos conocimientos repercutirán beneficiosamente en la credibilidad
de sus investigaciones y en la honestidad hacia sus lectores a la que usted
sin duda se debe.


Un saludo,

David de Cos

-------------------------------------------------------