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[escepticos] Re: viñetas de Mahoma

El Jueves, 16 feb, 2006, a las 13:14 Europe/Madrid, Francisco Mercader escribió: 


He tardado en responder porque no sé realmente qué decir. Tu percepción
del consentimiento debe de ser distinta de la mía  en el sentido de que
me parece que algunas Administraciones pudieran estar aquejadas de mala 
conciencia, hasta el punto de practicar una discriminación positiva
hacia cierto tipo de inmigración;
Ya me dirás qué significa 'discriminación positiva' en ese contexto. Si quieres decir que hay inmigrantes de ciertas procedencias que tienen más derechos que los de otras o incluso que los aborígenes, tendrías que explicitarlo. 


 lo cual sería legítimo si no fuese
porque no percibo correspondencia por la otra parte. Si frecuentaras los 
servicios de la sanidad pública, te darías cuenta de algo inesperado:
las exigencias desmesuradas y del trato vejatorio que prodiga una parte 
significativa de los inmigrantes (especialmente americanos) al personal
que le atiende. Me lo contaban y hasta que no lo comprobado
repetidamente no acababa de creerlo.
Disculpa pero eso tiene toda la pinta de ser una percepción muy sesgada. ¿No será que nos llama más la atención la exigencia de alguien a quien asumíamos acomplejado, sumiso o agradecido? Según este punto de vista que un 'nacional' se queje de que le hagan esperar para una radiografía se consideraría normal (no llama la atención, no se cuenta), mientras que la queja de un ecuatoriano o de un marroquí, que suponemos tienen menos derechos a atención sanitaria (falsamente, claro) y deberían estar agradecidos de tenerlo cuando en su país no se la dispensan, se 'cuenta' en la 'estadística' porque llama la atención por esa misma causa. ¿Pero por qué razón, si puede saberse, un hondureño o un peruano que vive y trabaja en España tiene menos derecho a la atención sanitaria que un español? ¿Por qué habría de mostrarse más sumiso y agradecido o menos exigente que cualquiera? La razón no puede ser que en sus países de origen no existan esas prestaciones o que no nos las dispensarían a nosotros (aunque existieran) si fuéramos allí a vivir. ¿O sí? Pero eso no es racional. 


 Respecto a la inmigración magrebí,
a mí no se me ocurriría ir  a un país de acogida y pedir que me
faciliten medios para practicar mi superstición particular; procuraría
que mis manías personales pasaran desapercibidas como deferencia hacia
los anfitriones;
Detesto las religiones, especialmente las de revelación, pero no se me ocurriría equiparar las creencias de la gente con las manías personales. En todo caso, estoy de acuerdo en que el Estado no debería subvencionar mezquitas o sinagogas. Lo de la iglesia católica es diferente y más complicado (como guardar fiesta los domingos), aunque la tendencia debería ser la eliminación de las subvenciones. 


lo mismo que cuando voy de visita a otra casa no pido
que me pongan de comer algo especial para mí y soporto lo que me ponga
la dueña de la casa sin poner mala cara. Esperaría que los visitantes se esforzaran en adaptarse o, al menos, fingir que se adaptan. No me gusta 
que los gitanos quieran resolver sus asuntos a tiros pasando de la
justicia general ni que algunos musulmanes intenten instaurar la Sharia
en pleno Occidente.
Ni a ti ni a nadie, supongo. No estamos hablando de cumplir las leyes (está fuera de discusión), sino de respetar los derechos individuales. Lo que quiero decir, de nuevo, es que un musulmán tiene derecho a llevar turbante si quiere, pero no a exigir que el Estado censure los medios de comunicación. 


No tengo ningún reparo en confesar que advierto en
mí un racismo sobrevenido desde hace algún tiempo  y ello no obsta para
que comprenda que la mayor parte de mis compatriotas  practique una
política de hermandad con personas que no la muestran hacia nosotros.
No creo que seas racista, sino que padeces una reacción típica y comprensible de defensa frente a lo extraño en contextos de inmigración no integrada. Pero lo grande de la democracia es eso, que puede venir un marroquí y exigir derechos y prestaciones que en su país no se atrevería ni a soñar. Por supuesto que ello implica pagar impuestos religiosamente y cumplir las leyes. Y si no, a la cárcel o a casa. Si se aplicara esto a rajatabla, habría menos 'racismo sobrevenido'. 

Un saludo cordial:
José Luis Mendívil