Re: [Fwd: Avistamiento de Armstrong]

[borgonoz@...>]

>> misteriosas, basta hablar con Luis Ruiz de gopegui o leer sus libros
>> publicados en McGraw-Hill (no es publicidad, pero no me importaria hacerla).
>> En ellos se explica todo lo que paso, y te aseguro que no hay hueco para el
>> misterio.
>
>
>?Hay algo de eso por la net?
>
>Saludos,
>
>JM

Aunque lo de Gopegui  (que era el director de una de las tres bases de
seguimiento del Apolo desde la Tierra) siempre vale la pena, no se si merece
el esfuerzo reproducir íntegro el texto de los últimos momentos previos al
aterrizaje tal como él lo escribe. 

No pone nada misterioso, solo habla de lo que todos sabemos, con alguna
anecdota poco transcendente:

a) Media hora antes del alunizaje se disparó el código de una alarma en el
ordenador de a bordo. ¿Habría que abortar la misión?. Tras buscar el libro
de códigos vieron que era sólo que el ordenador estaba saturado (overflow).
Desoyeron la alarma, solucionaron el problema y alunizaron).

b) Aterrizaron a seis kilómetros del lugar planificado, dado lo irregular de
la gravedad lunar (y no por haber visto ningún OVNI).

c) Todo estaba previsto tras el alunizaje. Antes de salir, los astronautas
debiían dormir algo. pero ¿cómo dormir si estaban sobre la Luna?. Se cambió
el plan, sobre la marcha, y pese a que eso nunca se debería haber hecho, se
permitió adelantar el paseo por la Luna.

Nadie dijo nada raro, solo problemas normales cuando uno aterriza en la Luna
y las comunicaciones con las Tierras tienen los problemas normales por la
distancia.

Sin embargo, Gopegui si cuenta una anécdota (muy divertida) cuando él estaba
de director de Fresnedillas (la base de seguimiento) controlando el primer
ensamblaje entre una nave estadounidense y una rusa en los años setenta
(durante la guerra fría).

Era costumbre que todas las estaciones lo grabaran todo. Tras acabar la
misión, a Gopegui lo llamó un amigo suyo desde la NASA diciendo que tenía
que borrar, sin verla, la cinta XXX.

Gopegui pidió confirmación y de nuevo le dijeron que destruyera la cinta.
Aunque trabajaba para la NASA, Gopegui pidió confirmación al Gobierno
español (para que os hagais una idea de la seriedad del momento, la orden de
acabar con la cinta le llegó también de Franco).

Gopegui estaba mosqueado ¿se habría visto algo en la cinta que se querría
ocultar?¿quizás algún OVNI?. Se encerró en una habitación y vió la cinta un
par de veces. No vió nada misterioso.

Aunque debía haber acabado con la cinta se atrevió a llamar a su amigo, que
le había dado la orden, a preguntarle porqué. El amigo sólo le dijo que se
fijara en la conversación que se mantenía entre los astronautas en el minuto X.

Gopegui aguzó el oido (las frases se oían muy mal) y al final escuchó "A ver
si estos jodidos rusos son capaces de hacer temblar menos su cápsula para
que nos podamos ensamblar bien".

Pese a que no era aún el tiempo de lo políticamente correcto, la expresión
"jodidos rusos" en la boca de un astronauta yanqui en una misión de
fraternidad ruso/estadounidense, se consideró por la NASA que podía levantar
ampollas, así que era nejor eliminarla.

La moraleja de todo esto, si es que tiene alguna, es que a veces la
destrucción de cintas o la pérdida de material se debe a motivos banales, o
de políticas concretas, y no a la presencia de OVNIS o a grandes
conspiraciones judeomasónicas de ocultación de datos.

Alfonso López Borgoñoz