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[escepticos] Información publicada en EL CORREO de Bilbao
San Sebastián tendrá un museo de la ciencia centrado en nuevas tecnologías
Félix Ares de Blas dirigirá el proyecto, en el que la Kutxa invertirá 2.100
millones
Cristina Torres-San Sebastian
Félix Ares de Blas, doctor en Informática e ingeniero de Telecomunicaciones,
es ya el director del museo de la ciencia en San Sebastián que, promovido
por la Kutxa guipuzcoana, comenzará a funcionar en la primavera del año
2000. Ares de Blas afronta con gran ilusión el reto de dirigir este
equipamiento, en el que la entidad de ahorro invertirá 2.100 millones de
pesetas y que pretende convertirse en referente de divulgación y enseñanza
de la ciencia en todo el País Vasco. El museo contará con un observatorio y
un planetario y estará especializado en nuevas tecnologías.
Ares de Blas fue elegido la pasada semana director de Miramón. Kutxaespacio
de la Ciencia, el ambicioso proyecto para crear un museo de la ciencia único
en el País Vasco en el parque empresarial de Miramón, en San Sebastián. El
director del museo considera que el centro debe convertirse en referente de
divulgación y enseñanza de la ciencia de todo el País Vasco ya que, recordó,
hasta el momento no existe ningún equipamiento de estas características en
Euskadi y el Planetario de Pamplona no incluye las aportaciones de un museo
de la ciencia.
Ares de Blas confía en que el nuevo equipamiento, financiado por la Kutxa
con 2.100 millones de pesetas y que nació de la iniciativa de un colectivo
de profesores universitarios denominado Zientzia 21, se dirija a la
formación y educación no sólo de los jóvenes, sino también de adultos y de
la propia comunidad científica.
Nuevas tecnologías
«Pretendemos organizar conferencias de personalidades en el mundo
científico, destinadas a investigadores y científicos, pero también queremos
formar a la gente no especializada para que las personas tengan criterio en
uno u otro asunto, porque la ciencia influye en la vida cotidiana», dijo el
director del futuro museo.
Ares de Blas puso ejemplos concretos. «Continuamente surgen cosas nuevas
como la clonación o el calentamiento atmosférico y queremos que la gente
tenga un voto responsable, porque la investigación de la ciencia sale de
nuestros impuestos», explicó.
El Kutxaespacio de la Ciencia estará ubicado sobre una superficie aproximada
a los 8.000 metros cuadrados e incluirá una torre observatorio de treinta
metros de altura en la que se habilitará un potente telescopio, y un
observatorio que acogerá el planetario. El resto del proyecto incorpora
exposiciones permanentes y temporales con las características propias de un
museo de la ciencia, pero con una singularidad: su especial dedicación a las
nuevas tecnologías, principalmente las referidas a la comunicación. «Hemos
pensado en la posibilidad de crear un estudio de televisión para que los
jóvenes creen sus propios programas, también mostraremos cómo funcionan las
fibras ópticas», dijo el ingeniero. El museo ofrecerá en cuatro
idiomas -euskera, castellano, inglés y francés- información sobre la
ciencia, diferente y lúdica, con carteles que recen «prohibido no tocar».
El recién elegido director del muso expresó ayer su satisfacción por el
nuevo cargo. «Estaba en el sitio oportuno en el momento oportuno», señaló
ayer Félix Ares de Blas. Empleado en la entidad de ahorros, Félix Ares de
Blas, de 50 años, tiene tras de si un importante currículo con destacadas
aportaciones en el campo de las telecomunicaciones, algunas de las cuales
incluyen descubrimientos pioneros en el mundo. Doctor en Informática e
ingeniero de Telecomunaciones, el director del nuevo museo de la ciencia es
profesor titular en excedencia en el área de Arquitectura y Tecnología de
Computadores en la Universidad del País Vasco y máster en Recursos Humanos y
Dirección Bancaria. Articulista en revistas científicas y asesor científico
del grupo americano CSICOP para la divulgación de la ciencia, Ares de Blas
ha asesorado en materia de comunicación a la Kutxa en los últimos años.
Apunte Editorial
Ciencia lúdica
La ciencia forma parte de la cultura. Y, por eso, ha de ser divulgada,
acercada al público, al igual que la obra de Picasso,Falla o Unamuno. Ese es
el reto que ha asumido Félix Ares de Blas como director del nuevo museo de
la ciencia de San Sebastián, un equipamiento que, a partir del año 2000,
llenará un vacío en el panorama cultural vasco. Hacer la ciencia
comprensible para el gran público, algo que no se logra en las aulas, era
hasta ahora algo que se hacía en museos interactivos de todo el mundo, pero
no en Euskadi.De ahí que el proyecto auspiciado por la Kutxa guipuzcoana,
que invertirá 2.100 millones en el museo, sea una apuesta por divulgar la
ciencia de una manera lúdica y atractiva, pero también por cubrir un hueco
cultural incomprensible porque, como bien apunta Ares de Blas, «la ciencia
influye en la vida cotidiana».Sin embargo, todavía es la gran desconocida.