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Re: [escepticos] Animales extintos



Estimados escepticos:
Mig Escribe: >Otra para el webeto, webeto, crees que en los proximos 10
anhos van a >poder clonar un mamut de esos que estan congelados en Siberia?, yo
>apuesto que en menos de 20 años los veremos en algun zoo. Otra para
>webeto, es posible obtener el DNA completo de pelos o huesos?, si es
>asi, la clonacion de algunos mamiferos "giganticos" no esta fuera lugar
>(si me pilla Spielberg, que estoy diciendo?)

Las posibilidades de clonación de material ADN antiguo son mínimas. Para
lograr clonar 3 ratones vivos se han trasplantado 274 embriones y antes de
Dolly se efectuaron 276 intentos. Varios ejemplares clonados han muerto
repentinamente (Discovery en español Sept 1999, pag. 10). El revuelo que
causaron los científicos británicos que crearon a la oveja ?Dolly? se debió
a que siguieron una técnica nueva, la transferencia del núcleo de una célula
adulta, en este caso de la glándula mamaria, a un ovocito de otra oveja al
que se le había destruido el material genético. La célula reconstruida con
citoplasma de ovocito y núcleo de célula adulta, formó el embrión que los
investigadores implantaron y dio origen, 150 días después, a la ovejita
Dolly. Sin embargo, el procedimiento no es sencillo, el equipo
experimentador lo realizó más de doscientas veces consiguiendo solamente
trece preñeces, de las cuales solo una llegó a término. Agreguese a eso que
el estado de conservación de los mamuts encontrados en el hielo tampoco ha
sido tan excelente como se suele creer o como quieren hacernos creer los
fundamentalistas como Scott M. Huse. El científico norteamericano William R.
Farrand estudió los mamuts congelados y llegó a la conclusión que de una
población de más de 50.000 ejemplares de mamuts que vivían en Siberia a
fines del Pleistoceno, se han encontrado aproximadamente unos 40 ejemplares
congelados, de los cuales solo cuatro estaban completos. En 1724 el
naturalista alemán Messerschmidt recorrió Siberia por mandato del Zar Pedro
en busca de pieles y yacimientos minerales, y encontró a orillas del río
Indigirka el cadáver completo de un mamut inmerso en la nieve. En abril de
1779, un buque siberiano de pesca divisó en la desembocadura del río Lena un
nuevo ejemplar bloquedo en el hielo. Llevaba a bordo al pescador tunguso
Ossip Shumakov, que dio cuenta del hallazgo. El ejemplar comenzó a
deshelarse en 1801 y fue extraído en 1806 por Mijaíl Ivanovich Adams, quien
lo encontró parcialmente destruido. El espécimen de mamut bien conservado
más famoso y mejor conocido se halló en agosto de 1900 en Berezovka, en el
banco del río Kalyma, parcialmente expuesto sobre barro congelado. Se suele
afirmar que su estado de conservación era tan bueno que fue comido por los
científicos que asistieron al Congreso Internacional de Geología de San
Petersburgo. Sin embargo, el ejemplar fue extraído en septiembre del año
siguiente a su descubrimiento y el guía de la expedición, O. F. Herz, relata
en un informe que cuando lo extrajeron la carne estaba en descomposición y
su hedor era insoportable. La expedición demoró cuatro meses en llegar desde
San Petersburgo hasta Berezovka, realizando el viaje en  tren, barco y
caballo, y el regreso fue igualmente difícíl, la expedición estuvo de vuelta
en San Petersburgo a comienzos de 1902. Dado el proceso de descomposición de
la carne, es imposible que pueda haber sido comido por seres humanos
civilizados, y menos aún en el VII Congreso Internacional de Geología,
realizado en San Petersburgo en 1897, o sea, cinco años antes!. En el verano
de 1977, durante unos trabajos de obras públicas realizados en Yakutsk, se
encontró un cuarto ejemplar en buenas condiciones, un pequeño ejemplar de
unos seis meses de edad bautizado ?Dima?, que conserva en su corazón varios
gramos de sangre.

Los estudios de recuperación de genes prehistóricos no han tenido los éxitos
espectaculares que aparecen en relatos y películas. Se ha tratado de
recuperar la información bioquímica contenida en el ADN mediante la
amplificación de secuencias de ADN fósil con la técnica PCR (reacción en
cadena de la polimerasa), aplicada en 1980 por Prager y colaboradores en
mamut. En 1984, los investigadores Russell Higuchi y Allan C. Wilson
clonaron a partir de una piel de cuaga (Equus quagga), cebra extinguida en
1883, solamente algunas secuencias de ADN mitocondrial, lo cual está muy
lejos de ?devolver a la vida una especie extinguida?, como asegura una
revista de divulgación comentando el hecho. En 1989 se anunció la obtención
de ADN de lobo marsupial, por parte de Thomas y colaboradores, y del
perezoso terrestre gigante (Mylodon) por Pääbo. En 1990, Edward M. Golenberg
y Michael T. Clegg publicaron la secuencia de un fragmento de 800 pares de
nucleótidos de ADN procedente de una hoja de magnolia del Mioceno, de hace
17 millones de años. En 1992, Alan Cooper y sus colaboradores publicaron un
trabajo en el que analizaron las secuencias del ADN mitocondrial obtenido de
huesos y de tejidos momificados de moas, grandes aves no voladoras que
vivieron en Nueva Zelanda, datados de hace 4.300 años. El mismo año se
publicó un trabajo de Rob DeSalle y George O. Poinar en el que se refieren a
la extracción de ADN de un terme fósil incluido en ámbar de hace 40 millones
de años. En 1992, Janczewski y sus colaboradores extrajeron material
genético de un tigre dientes de sable (Smilodon fatalis) de la formación
Rancho La Brea  y en 1993 Höss y Pääbo lograron extraer ADN de hemiones del
Pleistoceno superior.

Hace algún tiempo se anunció que el investigador Scott R. Woodward,  habría
aislado un poco de ADN de restos óseos supuestamente de un dinosaurio
encontrados en una mina de carbón en Provo, Utah, a 550 metros de
profundidad. Sin embargo, no existía certeza que el material fuese de
dinosaurio, podría ser de una especie perteneciente a otro grupo
prehistórico, solamente podía asegurarse que no corresponde con ningún
mamífero, pájaro, o reptil vivo y el descubrimiento corresponde solo a un
fragmento pequeño de un gene.

De todos los estudios de ADN antiguo, se puede concluir que la recuperación
de ADN fósil es más difícil de los que se pensaba. No está preservado en
abundancia ni es fácil extraer. La supervivencia de fragmentos del ADN a
través del tiempo geológico es teóricamente poco probable y es difícil de
probar. Con el tiempo, el agua y el oxígeno degradan los nucleótidos del ADN
y fragmentan las moléculas haciendo imposible la recuperación de grandes
trozos. Aún en condiciones ideales, con baja temperatura y en ausencia de
agua y oxígeno, la radiación del suelo elimina la información genética.
Considérese que estamos hablando de fósiles de millones de años y que quizás
lo más lejos que se pueda llegar es a clonar un gen, pero las células
contienen millones de genes. Clonar organismos extintos es actualmente
imposible debido a la inestabilidad del ADN y a la facilidad con que se
contamina. Es extremadamente difícil de suprimir la contaminación del material.

Un equipo de los científicos encabezados por el Dr. Jeremy Austin, pasó
varios años tratando de extraer ADN fósil conservado en ámbar. Utilizando
los métodos más avanzados para extraer la ADN de abejas y moscas, a pesar de
la calidad y el número de los ejemplares usados y de la sensibilidad de sus
técnicas, estos científicos no pudieron encontrar ADN en sus especímenes. El
ADN supuestamente extraído de los insectos fósiles era realmente de hongos
modernos y de los propios científicos. Esto sugiere que el ADN de los
insectos no sobrevive por períodos largos en el ámbar. y que los supuestos
éxitos anteriores en la extracción de ADN de organismos fósiles representan
contaminación con ADN moderno.

Las dificultades de clonar ADN fósil y las dudas respecto a lo hecho hasta
ahora pueden verse en PÄÄBO, S. 1994 ?ADN prehistórico?, Investigación y
Ciencia 208:64-71.

Saludos

                 Manuel