[escepticos] La "Alerta OVNI" en el Heraldo de Aragón

["Pedro J. de Celis" <decelis@...>]

Pura magufería...

http://www.heraldo.es/heraldo.html?noticia=105912

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LARA COTERA. Belchite | ¿Qué es eso? ¿Es un satélite? ¿Es una estrella? 
¿O es, tal vez, la confirmación de que la presencia alienígena está a 
las puertas de nuestro Sistema Solar? Preguntas sin resolver, 
expedientes "x" de amigos y vecinos y contactos con el más allá fueron 
en la madrugada del viernes al sábado los protagonistas de la "alerta 
ovni 2004" que se celebró en Belchite.

La peregrinación de cientos de amantes de lo insólito, ufólogos y gentes 
sedientas de respuestas llegadas desde Aragón, Cataluña y otros puntos 
del país comenzó antes de la medianoche. En la carretera, los focos de 
los coches que iban llegando lanzaban ráfagas de luz hacia el enclave 
aragonés de estos singulares encuentros en la tercera fase. Mientras, y 
sobre el monte elegido para los avistamientos, cámaras y grabadoras 
estaban listas para recoger las imágenes y los sonidos que podrían 
confirmar al mundo que no estamos solos en el universo.

De fondo, el sonido del "yidaky" de Esmeralda parecía llamar al 
encuentro con formas de vida más avanzadas. "Hay que sentir la vibración 
del instrumento; en parte, ésa es la fuerza que nos mueve a todos", 
explicaba la joven. Ella y sus tres amigas habían encendido unas velas y 
esperaban en primera fila a que comenzase el programa "Milenio-3" de la 
Cadena SER, el "culpable" de que miles de personas se congregasen el 
viernes en distintos puntos de la geografía española y latinoamericana 
para intentar ver algún platillo rumbo a planetas más avanzados.

De los congregados en Belchite, el que más y el que menos tenía algo que 
contar: "Cuando yo trabajaba en la Base Aérea de Zaragoza, en torre de 
control, vi muchos fenómenos sin identificar a través del radar. No sé 
lo que eran, pero sé que no eran normales", decía Pablo, vecino del 
pueblo. Silvia, que escuchaba de fondo las crónicas del más allá de sus 
insomnes compañeros, relataba también su experiencia: "Yo tendría 16 
años. Estaba cenando con mis amigos en un camping y vimos cómo una luz 
enorme cubría el recinto durante varios minutos. Nos miramos sin saber 
qué decir hasta que se esfumó", relataba la chica. "Pues no te pierdas 
lo que le pasó a mi abuela en Galicia", le interrumpía Laura, una de sus 
amigas. "Vio cómo un ovni pasaba delante del balcón de su casa, y ni 
estaba loca ni se lo inventó".

Al filo de las dos de la mañana, la "alerta ovni" calentaba motores. El 
presentador de "Milenio-3", Iker Jiménez, que dirigió el acontecimiento 
desde el Parque Juan Carlos I de Madrid, daba paso al corresponsal que 
se encargaría de radiar el evento en Belchite, Ángel Briongos. Para esta 
hora, ya eran varios los cientos de personas que miraban al cielo 
aragonés, pero no todos los presentes eran tan crédulos...

Escépticos versus crédulos

Sentados alrededor de unas linternas, varios jóvenes de Zaragoza 
preparaban calimocho. "Escuchamos el programa y nos apetecía venir por 
hacer algo distinto", admitían. De fondo, y "para ambientar" -como 
aseguraban entre trago y trago-, tenían puesta la banda sonora de "La 
Guerra de las Galaxias".

Ahora bien, la verdadera rebelión llegaba de manos de la tercera edad de 
Belchite. "Yo no comprendo ni lo que pasa en la Tierra. ¿Para qué me voy 
a poner a entender lo de los otros planetas?", se preguntaba Francisca, 
de 67 años, vecina de la localidad. "Éstos son unos encuentros un poco 
raros, no sé...", valoraba. "Pero tú te crees, mujer, que si hay 
marcianos van a venir a vernos a los humanos... ¡Si son inteligentes de 
verdad les tenemos que dar miedo!", le respondía su marido. En las 
radios de los coches, sin embargo, Iker Jiménez seguía derrochando 
expectativas: "Si yo fuera un extraterrestre, hoy me sentiría en este 
planeta totalmente rodeado de gente amiga".

Y aunque hubo que ponerles falta a los alienígenas, no faltaron los 
testimonios de quienes aseguraron haber avistado posibles ovnis durante 
la noche, ni tampoco las conversaciones llenas de experiencias 
sobrenaturales. Hasta las seis de la mañana, la "alerta ovni" alimentó 
ilusiones y expectativas... que no es poco.