MAXI VEGA
VITORIA.- El Parlamento de Vitoria
aprobó ayer la Ley del Deporte del
País Vasco, que permitirá a esta
comunidad, teóricamente, tener
selecciones deportivas separadas de las
españolas. Por primera vez, Herri
Batasuna ha participado en la gestación y
elaboración de una ley finalmente
aprobada con el apoyo de PNV, Eusko Alkartasuna
(EA), Izquierda Unida y la propia HB.
La sesión de ayer en el Parlamento
vasco reflejó, por tanto, el llamado
«frente nacionalista» que se viene
formando en los últimos meses. Un socio
del Gobierno vasco, el PSE-EE, votó a
favor de la devolución de la Ley del
Deporte, previamente consensuada con los otros
dos partidos del Ejecutivo, PNV y EA. Esta es la
primera vez que uno de los partidos coaligados
se descuelga de un proyecto al que previamente
había dado el visto bueno en el seno del
Consejo de Gobierno.
Los socialistas habían aprobado, con
alguna reserva, el proyecto de ley redactado por
la consejería de Cultura. Sin embargo,
durante el debate parlamentario en ponencia y
comisión, los otros dos socios pactaron
un buen número de modificaciones con
IU-EB y HB, lo que ha llevado al PSE a rechazar
el texto, porque ha sido
«adulterado», en palabras del
secretario general de los socialistas alaveses,
Fernando Buesa.
Los representantes del PSE sumaron ayer sus
votos a los de Unidad Alavesa y Partido Popular
en las enmiendas de totalidad y, por lo tanto,
para pedir la devolución de la norma al
Gobierno. Sin embargo, la mayoría formada
por los tres partidos nacionalistas e IU-EB
frustró esa petición y finalmente
la Ley del Deporte salió adelante.
Los tres partidos que se opusieron a la nueva
Ley lanzaron duras acusaciones contra los grupos
que la han sacado adelante, fundamentalmente por
politizar el deporte, elevar el tono
nacionalista y preferir el pacto con HB.
La nueva ley permitirá que las
federaciones vascas no se integren en las
españolas si así lo desean, y abre
la puerta a que se creen selecciones del
País Vasco para competir de forma
oficial, siempre que sean reconocidas por
ámbitos internacionales.
SIGNIFICADO.- En la práctica, la
repercusión de esta iniciativa
será mínima, puesto que los
organismos deportivos internacionales
habitualmente sólo aceptan a selecciones
representantes de estados. Por otro lado, nadie
espera que las federaciones vascas estén
interesadas en separarse de las estatales,
puesto que económicamente sería
suicida.
La portavoz socialista, Maite Pagazaurtundua,
aseguró que las
«energías» políticas
del Departamento de Cultura se han centrado en
poner la ley en «clave
nacionalista». Acusó a los que
apoyaron el texto de «inaugurar,
solemnemente y en sede parlamentaria, la
politización del deporte.
Carmelo Barrio, del PP, coincidió en
la valoración de la politización
de la ley por parte de los nacionalistas que, a
su juicio, pretenden convertir las federaciones
en «agentes de debate político,
poniéndolas en la disyuntiva de su
integración o no en las federaciones
españolas». Les acusó
también de «olvido
injustificado» de los acuerdos de
aislamiento de HB, «a quien le han dado
una inmerecida capacidad de
interlocución».
En la misma línea, el portavoz de UA,
Javier Moraza, consideró una
«irresponsabilidad» haber pactado
con HB. Acusó a los nacionalistas del
Gobierno de preferir la compañía
«de los que no respetan al adversario ni
el reglamento», en referencia a la
coalición radical. Respecto al contenido
de la ley, les acusó de «escribir
sobre el aire, porque no se va a poder
realizar».
Iñaki Anasagasti, portavoz del PNV en
el Congreso de los Diputados, respondió a
las críticas de socialistas y populares
con el argumento de que «en el fondo lo
que temen es que una selección vasca
ganaría a la española».
«Un día
histórico»
M. V.
VITORIA.- Tras la aprobación de la Ley
del Deporte, los partidos que la han apoyado
mostraron su apoyo a las selecciones vascas. Los
portavoces de PNV, HB, EA e IU-EB y los
representantes de la plataforma Esait, que pide
la creación de selecciones, vistieron
camisetas de apoyo a equipos propios.
Todos consideraron la de ayer una jornada de
alegría y esperanza, al dejar abierta la
puerta a la participación de los
combinados vascos en los campeonatos
internacionales. «Un día
histórico», dijo Martxel Toledo, de
Esait.
El representante del PNV, Iñigo
Urkullu, afirmó que ésta es una
«aspiración de la mayoría de
la sociedad» a la que se le ha dado
respaldo legal. Es, añadió,
«un primer paso» para que las
selecciones vascas puedan competir a nivel
internacional.
Jone Goirizelaia, de HB, dijo que es
«un paso importante para la
construcción nacional».
Tomás García, de IU-EB,
abogó por «un mayor reconocimiento
del deporte vasco». Sabin Intxaurraga, de
EA, lamentó que esta ley no suponga la
apertura automática de las puertas
internacionales a las federaciones vascas.