A mí personalmente lo que me empuja al "Unsuscribe" es el hastío
ante la pérdida de libertad que se percibe, ante la arrogancia de
ciertas afirmaciones, ante la coacción y la posterior irracional
violencia si por lo que sea decides contestar a algún mensaje de
quien no es fruto de la devoción de determinada gente (y no entro
a valorar si justamente merecido o no dicho aborrecimiento).
Además opino que como el que solo mira y calla al final otorga, y
dado que no es ese mi estilo (pues ante ciertas situaciones aunque
ya mayor aún me hierve la sangre), como no estoy dispuesto a ser
convidado de piedra de ninguna cena por mor de no ser tenido por
racista, xenófobo, antisemita o cualquier otro caprichoso epíteto,
pues es por lo que, tras meditarlo tranquilamente, me he decidido
por dejar vacante mi puerta en este tan querido patio de nuestra
Corrala.