Hola:
Lo primero agradecer los consejos sobre libros de arqueoastronomía.
Lo segundo... que (pese a que estoy hasta las cejas de curro...) no puedo
evitar meterme en un comentario sobre historia militar...
Decía Guillermo:
¿Es cierto lo que he leído -no recuerdo dónde- sobre las armas largas
de
avancarga (las de pedernal)? Decían que, tras la batalla, solían recogerse armas con dos, tres o más cargas en el cañón, atacadas unas sobre otras y sin quemar. Pese a que odio las armas y me dan un miedo terrible (soy capaz de
producirme automutilaciones mortales de necesidad con un abrelatas), reconozco
que el tiro de avancarga con pólvora negra tiene una cosa romática que me hace
envidiar a Javier (¿también teneis que morder los cartuchos? Había soldados
rusos -guerra napoleónica- que se arrancaban los incisivos superiores para
evitar ir a la guerra...) ... Y aunque no tengo su experiencia en el tiro sí he
leido mucho sobre historia militar.
Lo que comenta Guillermo es históricamente cierto. Y no dos o tres, si no
hasta seis o siete. Disparar en plena situación de combate no es nada fácil.
Incluso durante la segunda guerra mundial un 60% (no estoy seguro del
porcentaje, pero podría consultarlo) de los soldados en plena batalla no
llegaban a disparar ni una sóla bala. Este tema está muy reflejado en
varios libros de John Keegan (en su magistral "El Rostro de la Batalla" y su
polémica "Historia de la Guerra") o en "The Hallowed Ground" de Bruce Catton (el
mejor ensayo que se ha escrito sobre la Guerra Civil Americana; desgraciadamente
creo que no existe traducción al castellano)
Respecto al cometario de la inefectividad de las descargas de fusilería
solo recuerdo a los aficcionados a la historia militar la efectiva descarga
cerrada de las tropas de Wolfe en la Batalla de Quebec... o Bunker Hill y
Saratoga en la Guerra de la Independencia Americana, y por supuesto... la
delgada línea roja (la infantería de línea británica, no la peli) y sus
decisivas descargas en las fases finales de Waterloo.
Incluso yendo más atrás, las batallas de Gonzalo de Córdoba en
Italia. El uso de sus primitivos mosquetes y arcabuces fue
lo que marcó la diferencia entre las tropas españolas y las francesas, dándole
el triunfo a las primeras.
La bayoneta fue el (curiosamente simple) invento que acabó con los piqueros
y alabarderos al fusionar arma blanca y de fuego en una sola. Y la carga a la
bayoneta siguió siendo decisiva en muchísimos casos (incluso durante la segunda
guerra mundial hubo cargas a la bayoneta ¡contra tanques! que acabaron con
éxito!
Y no me enrollo más, que soy un pesado.
Un abrazo:
Eligio
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