Yo lo que indicaba en mi correo es que las acciones que los colectivos
deberían tomar es recurrir a medidas dónde las marcas se vean
perjudicadas por la "ignominiosa" publicidad que, según los
perjudicados, usan. Con estas bochornosas campañas de petición de
retirada de anuncios consiguen una publicidad añadida para la marca,
ergo les animan a que sigan utilizando publicidad poco creativa, cutre y
sensacionalista (nada nuevo en las TV, por otra parte).
Al final pasará como con Pedro y el lobo, tanta chorrada constante (y el
ejemplo del Bisbal lo es en grado sumo) impedirá, por hastío, que las
auténticas atrocidades de/en los medios pasen desapercibidas.