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Re:[escepticos] Historia]



Francisco Mercader Rubio wrote:

> Esta discusión de los últimos dias sobre autenticidad de datos
> históricos con la que os he estado dando la lata, me han hecho
> reflexionar sobre aquella clasificación que hacíais sobre si tal o
> cual disciplina merecía el nombre de Ciencia.
>
> Efectivamente: Si hay alguna actividad investigadora en la que
> menos se pueda aplicar el método científico, ésa es la Historia.
>

O, para el caso, la Arqueología (que no es Historia). Está claroque la
experimentación en las condiciones originales queda un
tanto fuera de lugar en ambos casos.

De todas formas,  la situación no es la ideal, pero tampoco es tan mala.

Se pueden hacer muchas cosas. Vayamos por partes.

> Por mucho rigor con que se acometa una investigación, al
> buscador de datos siempre se le escapará un último parámetro:
> La secreta intención de quien proveyó ese dato.

 Eso sólo implica que ningún documento puede aceptarse sin
análisis, pero no que estemos eternamente engañados. Si yo
estudio la Alta Edad Media española usando sólo las crónicas
de Alfonso III, estoy cometiendo un gran error, porque están
hechas para y por la glorificación de este señor. Si contrasto
con las crónicas árabes, podré obtener una idea mejor. Pero
si, además, uso la Crónica mozárabe de 754, bastante más
antigua que las otras, podré afinar aún más. La comparación
no será fácil, pero puede ayudar mucho.

> No hay más que recordar la payasada del cráneo de Piltdown,
> que engañando a la comunidad científica durante ¡cuarenta años!
> merced a la hábil falsificación de un individuo, consiguió figurar
> en algunos libros científicos durante una buena temporada .
>

Las falsificaciones suelen ser fáciles de detectar, pero hay algunasmuy
buenas y otras virtualmente indetectables (salvo error grave del
falsificador). Si se tira una casa de 200 años en algún sitio, las vigas

de madera suelen desaparecer muy deprisa. Eso es así porque se
usan para construir muebles con el aspecto de hace 200 años, y
venderlos como antigüedades. Si se hace bien, es indetectable.

> El mero hecho de que los datos históricos han de sufrir el
> efecto de la transmisión, incorporando todo tipo de ruido informativo,
>
> sin poderse comprobar el cuidado con que se haya efectuado ese
> trámite, incorpora -querámoslo o no- el elemento de la Fe como
> componente de las herramientas con las que valoramos la fidelidad
> de un dato.
> Nada de falsabilidad, nada de reproductibilidad del fenómeno en las
> mismas condiciones.... Al final, queda el historiador -que depende
> de los chismes que le cuentan o de los papeles que va encontrando
> por casualidad- como una  especie de paparazzo (más serio; eso sí
> y, encima, sin medios tan sofisticados).

Lo de los medios es un problema de dinero. Hoy en día, existe una
cantidad enorme de técnicas de investigación, pero no están al alcance
de todo el mundo. En paleoclimatología, por ejemplo, es fundamental
el estudio de columnas de hielo (extraídas de Groenlandia
habitualmente),
pero no es fácil montar una expedición para traerte esos datos. Hay
técnicas
como la traceología (estudio de las huellas de uso, que permite
averiguar
para qué se han usado ciertas herramientas de piedra) que son
tremendamente
útiles pero exigen instrumental muy caro.

Por otro lado, aunque no se pueda experimentar en las condiciones
iniciales,
hay experimentos que nos pueden aproximar a ellas. Hay gente que se
dedica
a una cosa llamada Arqueología Experimental en la que, por ejemplo, se
tallan útiles líticos o se hacen experimentos de penetración de ciertos
tipos
de lanzas o flechas en materiales diversos, con lo que podemos aventurar

hipótesis acerca del pasado bastante razonables.

En definitiva, la situación es mala, pero no desesperada. El uso de
técnicas
cada vez más sofisticadas y de metodologías mejores (una excavación de
hoy en día no se parece en nada, afortunadamente, a una de hace 100
años)
nos permite ir teniendo una idea del pasado cada vez un poco mejor.

Saludos,
Miguel Ángel Ruz.