[escepticos] El ratoncito Perez y la caspa

["Francisco Mercader Rubio" <fmercader@...>]

[Teresa]
¿No os parece que la doctrina promulgada por el propio estado soviético
era
suficiente para impedir el desarrollo de una forma de pensamiento
mínimamente
crítico?
No digo nada nuevo si recuerdo las profundas concomitancias entrel
marxismo y
cualquier otra religión: creación de mitos y "reificación" de
abstracciones
(como diría S.J.Gould), dogmas, libros sagrados y hasta paraisos (el
paraiso
obrero, pelín cutre, bocata chorizo y albal; pero peor estar siempre "a
la
derecha del padre"-¿se podrá ir a hacer pipí?_)
Encima, con el aliciente de las purgas, el Gulag y tantos buenos
estímulos para
los espíritus más masoquistas. Vamos, que si te va el fanatismo y la
Verdad
Absoluta, es una jugada que te derriben el muro.....Te agarras a un pope
o a lo
que sea.
No diría yo que sea una educación "cartesiana", precisamente....

[Mercader]
Pero ¿Alguien ha creído, ni por un momento, que la actitud de los
camaradas héroes soviéticos o la de los proletarios chinos enarbolando
el libro rojo, se distingue un milímetro de la actitud religiosa de
quien espera la tutela de un dios?  Para mí que las dos actitudes son
tan paralelas que entrarían en el mismo capítulo de un manual
descriptivo de las miserias humanas.  ¿No recordáis algún documental en
el que se entrevistaba a las juventudes chinas comunistas? Yo me quedaba
aterrorizado al ver aquellas mentes absolutamente paralizadas en sus
funciones críticas  por las consignas, que repetían al entrevistador
como si quisieran convencerle de algo.  No he visto cosa igual más que
en los testigos de jehová que dejo pasar a mi casa los domingos para
recrearme en semejante documento vivo  y recordar hasta dónde puede
llegar un cerebro humano  sojuzgado por otro cerebro.  Quizás la
religiosidad ha emergido de esa forma tan fulminante en la Unión
Soviética porque ya estaba perfectamente labrado el camino por la
domesticación anterior.  O quizás estaba larvada en la oscuridad de la
trastienda de cada casa. Tanto si es lo uno como lo otro, creo que
demuestra que la influencia cultural no hace más que barnizar lo que ya
estaba necesitando pintura. O sea, la biológica necesidad humana de
mitos de cualquier pelaje.

No en vano, se descubrió -no sé dónde- que los ratones de iglesia se
alimentan mayormente de la caspa de los fieles.    }:->
Saludos.