[Date Prev][Date Next][Thread Prev][Thread Next][Date Index][Thread Index]

Re: [escepticos] Naturaleza de la credulidad (BIS)



"Miguel A. Lerma" wrote:
> 
> Entonces, ?por que no la enga~nas tambien respecto a los
> regalos de cumplea~nos? ?Le haria mas ilusion si le dijeras
> que los regalos que recibe en esa fecha los trae el "hada de
> los cumplea~nos"?
 
¡Hombre, es verdad! Gracias por el consejo :))

> Es curioso, yo siempre agradeci a mis padres que a mi no
> me enga~naran. Yo creci con un enorme respeto por la verdad.

Bueno, cá uno es cá uno. Te aseguro que mi hija no es una mentirosa
compulsiva y siente un enorme respeto por la verdad; y yo también,
porsiaca :))

> Me parece que eso son racionalizaciones a posteriori.
> El entorno esta ya lo bastante lleno de mitos como para
> que sea posible educar el sentido critico sin necesidad
> de usar un mito mas dentro de la familia.  En el asunto
> de los Reyes Magos la mayoria de la gente se limita a seguir
> la costumbre y a imitar lo que vio hacer a sus padres sin
> plantearse si es o no apropiado.

¿Racionalizaciones a posteriori? Es muy posible. También es claro que se
trata de seguir una costumbre (absolutamente inocente, añadiría); si es
o no apropiada debería juzgarse por los resultados, y casi me atrevería
a asegurar (sin ninguna prueba, sólo a nivel intuitivo) que un muy alto
porcentaje de los escépticos actuales creyeron en los Reyes Magos o en
el ratoncito Pérez en su momento, y salieron solitos de tales mitos sin
grandes traumas (o ninguno). Por otro lado, siempre estoy dispuesto a
admitir que obro incorrectamente si se me presentan pruebas concretas,
que tampoco se trata de una defensa numantina de mi visión de las cosas
porque yo también he dudado al respecto; por ejemplo: si dados dos
grupos comparables, uno cuyos padres mienten sobre lo de los Reyes y
otros que nunca lo hicieron, se diera que en aquél hay un porcentaje
significativamente menor de escépticos que en éste, o de gente
respetuosa por la verdad. Ignoro si hay estudios en este sentido; si los
hay me gustaría conocerlos, que nunca es tarde para corregir actitudes
si son erróneas :))

> ?que clase de educacion das
> a tus hijas sobre los conceptos de verdad y mentira?
> Yo creci con la idea de que la mentira es como la agresion
> fisica: solo esta justificada en casos extremos de defensa
> propia. La mentira es un instrumento de manipulacion, y
> como tal implica una falta de respeto hacia la dignidad
> de los demas. Yo no podria mentir a alguien a quien quiero
> y respeto. Por otro lado, tampoco me considero con el derecho
> a cuestionar las tecnicas educativas de otros, por tanto siempre
> me cuidare muchisimo de decir que lo que haces esta equivocado,
> pero no deja de plantearme grandes dudas e interrogantes
> (por ejemplo ?como le explicas a un ni~no que le has estado
> enga~nando durante todo ese tiempo?).

Respecto a esto último, pues ¡diciéndoselo! Así de sencillo, a su debido
momento y sin dramatizaciones extemporáneas. Quizá explique mejor lo
anterior si me refiero al resto de la acotación de tu mensaje: en
principio yo suscribiría c por b todo lo que escribiste, pero sólo "en
principio", difiero en cuanto a absolutizar el valor, y desde mi punto
de vista la verdad no es un valor absoluto. Primer punto: siempre he
sostenido que la extremada sinceridad en todos los aspectos de la vida
puede llegar a ser tan dañina como la compulsión a mentir. Segundo
punto: por lo anterior, considero que el valor "verdad" ocupa rangos
distintos según sea la faceta a considerar. Está claro que en el ámbito
científico, en la argumentación racional, el valor "verdad" ocupa el
rango más alto de los posibles, hasta casi llegar a ser un valor
absoluto, tal y como planteas. Ahora bien, se dan situaciones en la vida
donde el valor "verdad" debe competir con otros valores de igual o mayor
dignidad, siendo que en ocasiones debe ceder ante ellos, y no me refiero
sólo a "casos extremos de defensa propia", ejemplos los hay a miles y de
forma cotidiana: tu mujer estrena peinado, a ti te parece horroroso,
pero ella te pide tu opinión con una sonrisa. Tú le contestarías
probablemente que no te gusta, que te parece horroroso, porque esa es la
verdad sin importar la desilusión que cause; yo, en cambio le diría que
sí, que está preciosa. ¿He mentido? Por supuestísimo, y no ha sido en
defensa propia, pero he agradado a mi mujer diciéndole algo tierno,
valor que en ese momento y para ese caso era más importante que la
"verdad", ¿crees que por eso falté el respeto a su dignidad? Yo creo que
no; mentirijillas de estas decimos varias veces al día (yo al menos)
porque sirven para mejorar la convivencia sin sacrificio alguno. Por eso
me gustan las croquetas de mi suegra y río los chistes malísimos de mi
padre, soy así de mentiroso ;-))

El caso de los Reyes Magos y mis hijas es similar: para mí, entre
decirles la verdad o contemplar su excitación durante esos días por la
magia que las rodea, prefiero que disfruten lo segundo, es un valor
preferente en esa edad, siempre desde mi punto de vista.

Así que contestando a tu pregunta: ¿qué clase de educación das a tus
hijas sobre los conceptos de verdad y mentira? Pues intento enseñarles
lo mejor que sé lo que arriba he esbozado: que sólo una pequeña porción
de valores pueden considerarse absolutos (la vida o la dignidad humana
entre ellos) y que la verdad y la mentira deben administrarse con sumo
cuidado, pues fácilmente se combinan con otros valores de igual
relevancia y está en el criterio de la persona el saber cuál elegir. Más
importante entonces que inculcarles conceptos como "verdad" o "mentira"
como si fuesen templos inviolables, me parece que es sugerirles los
criterios con los que puedan establecer su orden de prelación de valores
y cómo aplicarlos a los casos concretos.

No sé si he logrado expresarme adecuadamente, en cualquier caso intuyo
que sería un buen debate éste de si debe ser la verdad un valor absoluto
o cuasi-absoluto o no.

Venga, un saludo

José Alonso