Re: [escepticos] Hablando de leyendas gastronómico-epidémicas

[Josep Catala <jcatala@...>]

En/Na "C. Mario del Río" ha escrit:

> La historia que les anexo es real, el profesor de Técnicas Gerenciales,
> Ignacio Burgos, del Postgrado de Mercadeo de la Facultad  de Farmacia (UCV)
> nos contó detalladamente lo  ocurrido.
> Quiero compartir esto con ustedes pues debemos tener cuidado con  lo que
> comemos. Por  nuestra familia, por nuestros  hijos.
> Tomasita Catanese

> [..................]

La Tomasita en cuestión se las trae, y se ha hecho merecedora de ingresar
en el eximio gremio de Inventores de Historias Urbanas. Además, con
"summa cum laude", porque es la primera vez que veo involucrado en el
"luctuoso suceso" a un profesor de Técnicas Gerenciales del Postgrado
de Mercadeo de una facultad de Farmacia. Y es que de todo hay en este
mundo.

Veamos: para empezar, de "Salmonella" existen unas 2.200 variedades...
Además, es extraordinario hallarla en carne de cerdo, porque casi
siempre (por no decir siempre) aparece infectando aves de corral, leche
no tratada, huevos y sus derivados, reptiles domésticos (que ahora están
tan de moda....), marihuana y colorante de cochinilla. Y punto.

Por otra parte, eso de que "después de saciar el hambre comenzó a
sentir malestares abdominales" no se lo cree ni la Tomasita: entre la
ingesta y los retortijones debidos a una salmonelosis
transcurren un mínimo de 12 horas y un máximo de 48.

Una salmonelosis puede cursar sin más problemas, o puede llegar a
producir la muerte, en casos muy raros, y en personas ya afectadas
por otras dolencias, o que sean inmunodeprimidas. Desde luego,
ninguna "Salmonella" juega a "bajar las defensas". Y, desde luego,
eso de que la "E.coli despertara de su letargo" es es, como mínimo,
un chiste malo. "Escherichia coli" la tenemos todos (bueno, los
magufos poco...) en los intestinos. Es lo normal; pero ni la "E.coli"
habitual ni una de sus variantes más peligrosas (O 154 H 7)
"come los tejidos del organismo a velocidad asombrosa".

Y así etcétera, etcétera. Nada, que la Tomasita le ha cogido manía
a los restaurantes chinos. Bueno: está en su derecho, pero lo que
no puede hacer es meter mentiras en el berenjenal y removerlo
todo para confusión del ciudadano no avisado.

Saludos glutámicos.

Josep Català
P.D.- Por otra parte, ¿seguro que la carne que comieron en el
chino era de cerdo? Lo digo porque, como todo el mundo
sabe, en los alrededores de los restaurantes chinos nunca se
ve a ningún perro o gato.Y, también, que nunca se ve por la
calle a un chino anciano. ¿Por qué será todo ello?