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[escepticos] RE: [escepticos] Soteriología



----- Mensaje original -----
De: Alberto Villa <albertovilla en hotmail.com>
Para: <escepticos en ccdis.dis.ulpgc.es>
Enviado: jueves 2 de noviembre de 2000 2:54
Asunto: [escepticos] Maria gratia plena

> [Alberto] Pues por el significado que conozco de la palabra soteriología,
se
> me ocurre que sólo le cabe a la religión católica, así que no entiendo eso
> de que es una religión soterológica, como si esta fuera una categoría de
> clasificación de religiones en la que podrían clasificarse otras que no
> fueran la católica. Además yo vinculaba, tal vez equivocadamente, a la
> soteriología con la redención y no con la fe. [...] si estoy
> equivocado, pues me corriges, lo fundamentas, das referencias, datos y
> antecedentes y sanseacabó.

Nada que rectificar por mi parte. Quizás el término "soteriología" convenga
más a la parte de la teología católica que trata de la salvación,
naturalmente relacionada con la redención. Por "soteriológico" yo entiendo
las promesas de salvación que una religión cualquiera hace a sus fieles,
considerada la salvación como el acceso, en mayor o menor grado, a la manera
de existir de la divinidad a la que se da culto. "Soteriológico" es por
tanto un término genérico que puede aplicarse a todo lo que se presenta como
"salvífico". En este sentido, la mayoría de las religiones actuales son
soteriológicas, pero históricamente está muy lejos de ser así. La inquietud
por la salvación impregna la vida religiosa sólo desde los albores de
nuestra era.
Te veo un poco obsesionado con los "hechos, datos, referencias". De momento
no he conseguido encontrar una referencia que "autorice" el uso religioso no
católico del término, pero que el uso del término sobrepasa lo estrictamente
católico, e incluso lo religioso, puedes observarlo en la siguiente cita:

«La función histórica del Estado será la de liberar al ser humano de las
múltiples servidumbres a las que se ha visto sometido desde el comienzo de
la historia y multipicar, por la unión de los individuos, las
potencialidades humanas elevando al hombre a una forma superior de
existencia en cuanto a educación, poder y liberación de la coerción
exterior, que los hombres aisladamente serían incapaces de realizar
(García-Pelayo 1977, 84). Esta naturaleza moral del Estado típicamente
hegeliana, de talante soteriológico y en clara oposición a la idea de
Estado-guardián característica del liberalismo clásico, y su instrumentación
mediante el estamento del trabajo (lo que Lassalle llamaba Arbeitsstand),
pasarán a integrar el grueso de la argumentación proestatalista orteguiana.»

Si aún tienes dudas de que pueda haberme inventado yo esa cita, puedes
consultar el artículo completo en:
http://www.uv.es/~afd/CEFD/1/Bastida.html.

Como modelo de religión antigua no salvacionista puedo mencionar la griega;
como referencia puedes consultar Erwin Rohde, Psique, ediciones varias, la
última que yo conozca del FCE.

Las aspiraciones del hombre a la inmortalidad eclosionan -al menos en el
área de influencia de occidente, o sea, el mundo grecorromano- en el siglo 1
de nuestra era y en su origen están las religiones mistéricas. Sobre su
introducción en el área  romana, por ejemplo, se puede consultar a J. Bayet,
«La religión romana», cap. 10, "Los cultos de salvación". Hay traducción
castellana antigua y muy mala (Esto es un juicio, pero espero que me creas
si te digo que tiré la traducción a la basura en cuanto me conseguí una
edición francesa. Ahora lo lamento, porque posdría habértelo demostrado
dándote un ejemplo de traducción y original).

Una obra interesante que puedes consultar sobre la influencia de los cultos
mistéricos en el cristianismo primitivo es «Los misterios paganos y el
misterio cristiano», de Alfred Loisy, editada por Paidós (es una monografía;
pido disculpas por no dar el título en cursiva o subrayado, pero el script
no me lo permite). De ella saco esta cita (cap. 1, 2, pág. 11):

«[refiriéndose a las religiones con cultos mistéricos a finales del s. 1 aC]
Lo que caracteriza a primera vista a todas estas religiones, en el tiempo en
que se ofrecen a nuestra consideración, es que pretenden dar una garantía
particularmente segura de inmortalidad bienaventurada a sus iniciados, como
por un privilegio especial, individual, una verdadera gracia que se aplica a
sus personas. Los cultos nacionales de Grecia y Roma, los de Babilonia y
Asiria, en la medida que se puede juzgar, incluso el culto de los judíos, no
tenían nada parecido.»

El caso es que el autor, Loisy, no da notas ni referencias, no ofrece datos
ni presenta hechos para fundamentar esta afirmación. Según la contraportada,
Loisy era profesor de historia de las religiones en el Collège de France y
en la École de Hautes Études y, siempre según la contraportada, una de las
figuras más discutidas e interesantes del catolicismo del siglo 20. Pero
como por desgracia la contraportada no da referencias  para poder verificar
estos datos, creo que el escepticismo está justificado y lo más adecuado es
no creer una palabra y esperar a la invención de la máquina del tiempo.

DS