El escepticismo nada tiene en contra del protocolo. Estos tratamientos
están derivados de la costumbre y es de buena educación utilizarlos. Su
uso es independiente del significado inicial de la palabra.
Nada de esto tiene que ver con supersticiones religiosas. El uso
adecuado de los tratamientos y con ellos la forma de sentar a las
personas a una mesa para convenir cosas es todo un arte. Como una vez
oí: "Un jefe de protocolo puede llegar a provocar una guerra y también
puede evitarla"
Tal vez. Yo sí soy republicano, yo sí he hablado con el rey y con la
reina y con el príncipe y he utilizado el protocolo y tratamiento
adecuados puesto que según la constitución aprobada por todos es quien
es. Por cierto, siempre de "majestad" y nunca saludar o dirigir la
palabra hasta que "su majestad" no lo haga primero.