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Re: [escepticos] Aislamiento y SIDA



"Ramón Díaz-Alersi" ha escrito:

> > Quiero decirles a ustedes en confianza algo que no quise
> > publicar en el diario. Se trataba de un primo de mi esposa
> > con el cual no teníamos trato por problemas familiares.
> > Cuando se supo que él y su hijita de cuatro años tenían el
> > virus fue abandonado por su único hermano que nunca más se
> > acercó a él.
>
> Por curiosidad ¿cómo se contagió la hija de tu primo? El único mecanismo de
> contagio que se me ocurre es el contacto con la sangre del padre a través de
> una mucosa. Es extraño, sobre todo porque no nos dices si su esposa se
> contagió también. No es común que los hijos de una padre seropositivo se
> contagien.
>
> Saludos.
>
> Ramón Díaz-Alersi

Tienes razón. Reconozco que soy excesivo en mis comunicaciones
lo que me hace olvidar lo esencial.
El primo de mi esposa se contagió intercambiando agujas con el
grupo de amigos, que murieron todos.
Sin embargo la tía de mi mujer decía que era la esposa de su hijo
quien lo había contagiado, que no lo creo.
Cuando a este primo se le declaró la enfermedad, la esposa lo
abandonó,. Tenía con él dos hijas, Micaela, la mayor, que murió,
y Ludmila.
En aquel tiempo el 25 % de los niños que nacían de mujeres
seropositivas también se infectaban. Cuando salió el AZT ese
porcentaje se redujo al 8 %.
De las dos hijas solamente la mayor nació con el virus en
la sangre. La menor, por suerte, es seronegativa.
Al separarse el matrimonio la mayor, Micaela, permaneció
con su padre y sus abuelos. La menor se fue con su madre.
Extrañamente a la mujer (o no tan extraño, porque hay muchos
casos) nunca se le declaró el SIDA pese a que ya han pasado
más de doce años desde que se contagió. Mi hija tiene ya 12
años, y la niña que murió nació el mismo año que ella.
Tal vez el objetivo de esta carta, más que contar historias
personales, sea transmitir la experiencia que hemos tenido
muy íntimamente en la familia en el sentido de que no hay
ningún peligro de contagio por convivir con enfermos de
SIDA.
No hay ningún caso en el mundo de que alguien se
enfermara por el solo hecho de cuidar un familiar enfermo.
Aunque les parezca extraño lo que les voy a decir es muy
baja la posibilidad de contagio (¿no suena esto como la
baja radiactividad del plutonio?). Estando en la cosa me
contaron varios familiares de enfermos de SIDA que
llegaron a clavarse agujas o una abuela que sin pensarlo,
cuando su nietito enfermo de SIDA se hizo un corte, para
limpiarle el dedo se lo chupó, por esa creencia que tiene
alguna gente de que la saliva es antiséptica. Nada
les pasó. El personal que atiende los enfermos de SIDA
muchas veces se cortan o se pinchan con las agujas y en
general no pasa nada.
Y aquí me estoy metiendo en aguas tormentosas como
es mi mala costumbre. Hasta yo pienso que en algunos
casos de demandas que han hecho médicos o enfermeros
por haberse contagiado el SIDA en el lugar de trabajo,
yo he sospechado que se lo agarraron en otro lado y
que vieron la ocasión de hacerse unos pesos demandando
al hospital. (Lo dije).
    En un caso me consta por lo menos. Un enfermero
homosexual que tenía SIDA me confesó que él se lo
había agarrado en sus relaciones sexuales y no en el
trabajo como había dicho.
    Por otro lado, Mig, ese mito al que te refieres de los
que dejan agujas con sangre infectada, no es más que eso.
Las agujas que hay en las playas son de drogadictos que
las dejan tiradas irresponsablemente. En Santos una vez
pisé una aguja así en la playa, y aquí estoy, diez puntos.
    Por otra parte, pese a lo grave del SIDA, tiene la
ventaja para los seres humanos de que no pervive fuera
del cuerpo durante mucho tiempo. No aguanta la sequedad
ni el calor. En una aguja infectada al poco rato mueren los
virus.
Así que hay cuatro formas de contagiarse:
1) Relaciones sexuales en las que se produzca un desgarro
en las mucosas (especialmente si el coito se practica en
órganos no previstos por la naturaleza).
2) Transfusión de sangre o subproductos infectados.
3) Utilización de una aguja hipodérmica usada previamente
por alguien infectado.
4) Contagio intrauterino o en el momento del alumbramiento
entre la madre y el hijo.
Los otros casos que se han contado (visita al dentista, etc)
pertenecen al folklore.
Hay un foaf tale muy conocido. Un tipo se levanta una mina
brutal. Se encaman en un hotel. A la mañana el hombre se
despierta y su hermosísima conquista ya se ha ido, pero le
dejó en el espejo escrito con rouge: "Bienvenido al club del
SIDA"
Como se puede ver, las 4 formas expuestas pueden ser
fácilmente controladas y permiten que los infectados lleven
una vida normal, incluidas las relaciones sexuales si las
practican con los medios recomendados, fundamentalmente
condones.
El contagio intrauterino o en el alumbramiento también ha
sido disminuido enormemente gracias al AZT.
Sumado a todo eso, el éxito del cóctel de medicamentos
ha hecho que disminuya mucho el número de los muertos,
tanto cuantitativa como proporcionalmente.
Desdramaticemos el SIDA. Es una cuestión de salud
física, pero también de salud mental.
                                            Héctor