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Re: [escepticos] Que es todo esto sobre CUBA?



Señor Navarro:

El motivo de que conteste a este mensaje, que en principio no va conmigo, es
que ha vuelto usted a hacer caso omiso a mis solicitudes de que deje de
emplear mi nombre en mensajes a otros colisteros, máxime cuando dicho empleo
va acompañado de tergiversaciones y mentiras. Pero, puestos ya a la tediosa
tarea de responder a sus mensajes, ya lo hacemos de forma más completa.

Héctor Walter Navarro wrote:

> Rafael Budría ha escrito:
>
> > Con sinceridad, todas las discusiones sobre Cuba las he seguido poco
> > por no decir nada.
>
> Tienes todo el derecho Rafael. El escepticismo tiene muchos temas,
> y por suerte se siguen distintas líneas de discusión en esta corrala.
> Cada uno se engancha en la que le interesa. Veo que no estás de
> acuerdo con el Dr. Torres cuando dijo que discutir sobre las
> pseudomedicinas es más importante (por la implicancia en la salud
> de la gente) que discutir sobre OVNIS.

Observo consternado, Sr. Navarro, que sigue usted con la innoble costumbre de
lanzar a siniestro (a diestro se cuida muy mucho de hacerlo) sus poco
afinados juicios de intención. Usted verá. Pero no se sienta libre de
hacerlo. Esa es una libertad que invade los derechos de los demás, y en
consecuencia es una libertad ilegítima. Ya me imagino que eso a usted le
importa poco, ya. De todas formas, le insisto: es costumbre nefanda que en
tiempos de mayor dignidad colectiva era colectivamente censurada. Y en estos
tiempos de triunfo del relativismo moral que usted ha conseguido introducir,
no cambia la esencia moral del asunto. No crea usted que estas maniobras
torticeras de tergiversar lo que unos y otros dicen pasa desapercibida.

> En eso sí que yerras. Es total relativismo. En esta corrala estamos
> para combatir el pensamiento irracional y hay que "machacar"
> sobre eso. Yo paso sobre los que dicen "por mí como si te la
> machacas". Nada de lo humano me es ajeno.

Me temo, señor Navarro, que poco entiende usted de relativismo. Suele ocurrir
entre la gente poco reflexiva: de lo que menos entienden es de aquello que
más practican. En lo otro que dice, lo de pasar por encima de alguien, vuelve
a poner de manifiesto que lo suyo es imaginar situaciones irreales, e
intentar presentarlas como reales. ¿Cómo pretende, diciendo cosas tan
absurdas como éstas, que le creamos cuando cuenta sus pretendidas
experiencias personales? Finalmente, señor Navarro, me temo que tampoco ha
entendido usted la noble frase "Soy humano, y nada de lo humano me es ajeno".
No se refiere, señor Navarro, a que todo lo humano sea suyo y en consecuencia
pueda hacer con ello de su capa un sayo, y tratar las cosas humanas con el
desprecio con el que aparta con el pie una piedra molesta del camino. Créame,
señor Navarro: la frase se refiere justamente a lo contrario. A asuntos que
le resultan tan lejanos como el respeto a los demás.


> Me llama la atención que consideres que la realidad se puede refutar.
> Esa es una profesión de fe idealista que considero que los
> escépticos no podemos suscribir.

¡Ay, señor Navarro! ¡Cómo se nota que fue la pistola, y no los libros, su más
querida y eficaz herramienta analítica durante su paso por la universidad! La
"realidad" ajena a esta corrala, señor Navarro, no tiene forma de entrar en
ella. Lo que aquí entran son las distintas lecturas de la realidad que pueden
hacer los diferentes corraleros, previa su transformación en lenguaje
escrito. Y esas lecturas y escrituras son refutables, y nuestro papel como
escépticos es someterlas a refutación. Ya le he indicado en otro mensaje (que
se ha cuidado usted muy bien en no responder) su habitual error de confundir
los planos de la realidad y del discurso sobre ella. Aquí tiene un buen
ejemplo. Cierto es que podríamos pensar que usted sabe diferenciar
perfectamente, y que simplemente dice lo que dice a fin de tergiversar las
palabras de un colistero que le molesta, intentar provocarlo y, en última
instancia, ver hasta dónde puede tirar de la manta sin que se rompa. Pero
hemos quedado en no hacer juicios de intención, ¿verdad? En consecuencia,
mejor nos quedamos con la primera hipótesis: su confusión mental acerca de la
realidad y los discursos acerca de ella.

> Quizás lo que has querido decir es que sigues considerando que son
> falsificados los documentos que Rafael nos envió y que el Dr. Torres
> es un personaje inventado por él, pero Javier Mari ya ha aclarado
> la cuestión.

¿Nuevamente haciéndose un lío, señor Navarro? Mire usted, el colistero que
envía los expedientes del Dr. Torres no se llama Rafael. Lo que aclaró Javier
Marí es que él también ha recibido mensajes del Dr. Torres, al igual que los
he recibido yo mismo. Pero eso nada dice en relación con que los documentos,
o el propio Dr. Torres, sean inventados o dejen de serlo.

> >Nuevamente caes en el idealismo. Consideras que la cuestión es
> contrastar opiniones. Retrocedes tan atrás como a los tiempos
> de Sócrates y su mayéutica (etimología: parir palabreríos)
> o a los peripatéticos (etimología: discutir pateando).

Señor Navarro, contrastar opiniones es una actividad muy noble, mucho más
noble que intentar imponerlas a través de medios torticeros.

> En la actualidad los científicos
> no desdeñan la confrontación con la realidad. Por el contrario
> formulan teorías, por ejemplo, "la medicina cubana está basada
> en la ciencia" y luego la confrontan con la realidad, y según ese
> resultado reformulan o no su teoría.
> Por favor, no lo confrontes con memorandums de la OMS,
> que es pura sanata política, ni de la UN. Ahí se imprime lo
> que cada gobierno les entrega y no tienen facultades de
> investigar si reflejan fielmente la realidad interna.

Señor Navarro, lo que usted dice no es sólo una mentira, sino una difamación.
Le ruego que aporte pruebas fehacientes (no historias familiares, por favor)
que demuestren su grave acusación a unos organismos internacionales
universalmente reconocidos. Si tuviese alguna fe en su honorabilidad,
añadiría "o de lo contrario retire su acusación", pero mejor lo dejo quedar.

> Si tú y Bello Diéguez se decidieran a confrontar la realidad,
> lo que ambos han desechado porque tú dices que te interesa
> poco y nada el tema y Bello Diéguez se ha negado a llevar a
> la práctica mi sugerencia de investigar in situ la cuestión.,
> se verían ante la situación de tener que rectificar sus
> convicciones más queridas y arraigadas.

Parece, señor Navarro, que caen en saco roto mis solicitudes de que deje
usted de emplear mi nombre para presentar sus mentiras y difamaciones.
Realmente es una lástima que persista usted en sus prácticas tan poco
elegantes. Con toda franqueza, lo peor de todo es que resulta usted aburrido.
Ya, ya sé que algún colistero ha alabado en tiempos su sentido del humor. Si
me permite un consejo, no haga caso. Pero haga usted en eso lo que estime
conveniente, faltaría más.

De todas formas, me permitirá usted que apele nuevamente al Sr. Moderador a
fin de que en esta corrala se pueda jugar con limpieza, y no con estas
marrullerías que tan gratas y habituales le resultan. Con toda franqueza,
prefiero el juego institucional a la necesidad de rebajarme a decirle cosas
que pueda entender de puro familiares que le resultan. Van ya tres ocasiones
seguidas en las que usa usted mi nombre sin venir a cuento y sin necesidad; y
no sólo eso, sino añadiendo a continuación mentiras y falsedades. Le ruego
nuevamente que deje usted de actuar de manera infame.

Consternado veo también que persiste usted en reclamarse vidente acerca de
mis convicciones. Ya le he dicho, señor Navarro, que ni las conoce, ni son
asunto suyo. ¿Qué pretende, señor Navarro? ¿Dedicarse al "calumnia, que algo
queda"? ¿Seguir el juego de que "una mentira repetida se convierte en una
verdad"? Pues vaya papelón, señor Navarro, y vaya ingenuidad venir con ésas
en esta corrala. Ya metidos en frases hechas, permítame recordarle que "no se
puede engañar a todo el mundo todo el tiempo". Es algo que las personas como
usted suelen olvidar frecuentemente.

> Tal vez tengáis razón. Fue muy duro a mi edad, tener
> que revisar ideas de toda la vida. Sufrí el rechazo de
> queridos amigos que hasta me llegaron a acusar de que
> me había vendido a los "gusanos" de Miami.

Señor Navarro, en cuanto a sus asuntos personales sólo puedo decirle que por
mí, como si usted se la machaca.

Saludos

JM