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Re: [escepticos] Aislamiento y SIDA ERA [escepticos] Más sobre Cuba yel SIDA
"FJose Ra." wrote:
> Inicialmente, saludos de este "intruso" que se le ha
> ocurrido entrar, sin pedir
Sé bienvenido :-)
> a un nazi o algo que de lejos se lo parezca, pero me
> parece que no se ha dado cuenta del peligro que encierra
> la simple existencia de aquellos lazaretos. Me ha llamado
> la atención, y a la reflexión, la defensa que hace de esos
> "campos" cubanos donde, por lo visto (yo lo ignoraba), se
> internan a los enfermos contagiados por el SIDA.
De lo poco que he podido leer al respecto, poco o nada tiene
que ver los "sidatorios" con campos de concentración. Antes
al contrario.
> Sinceramente me ha entrado un escalofrío al leer tamaña
> barbaridad y acto inquisorial para con unas personas que
> merecen el uso de su libertad
> De nada me vale que todos sean seropositivos (médicos,
> fontaneros, cocineros, etc.), porque en Dachau, por
> ejemplo, todos los cocineros, fontaneros, etc., también
> eran judíos, comunistas o "enfermos" sociales.
> El problema es que no podemos, bajo ningún punto
> civilizado posible, impedir a alguien, por el motivo que
> fuere, pasear por el Malecón de la Habana o por cualquier
> calle de Santiago de Cuba o morirse donde les apetezca, si
> no ha habido antes una sanción penal. ¿En nombre de quién
> lo vamos a prohibir? Señores, si nuestra furia
Bueno, el problema es que parece que nadie lo impide. Hace
un par de días leía un relato de una escritora cubana
exiliada en Miami, publicado en la revista de uno de los
grupos más radicalmente anticastristas de los existentes en
dicha ciudad. En dicho relato, la escritora contaba una
anécdota sucedida en el malecón. Un jovencito se zafaba de
otro joven de pelo largo, mayor que él, protestándole que si
no había pago, no había trato carnal. Tras un intercambio de
palabras, el joven de pelo largo se despedía diciendo que se
iba al sidatorio, que era donde vivía. La escritora se
centraba más en la pobreza que lleva a la prostitución; pero
no dejaba de salir una imagen del sidatorio como un lugar
del que la gente sale para pasearse por el malecón. Por
supuesto, es sólo un relato. Pero me llamó la atención que
la autora no cargase ningún tipo de tinta negra sobre el
sidatorio. Es posible que haya sido porque no haya tinta
negra que cargar.
> El segundo problema, es el de la educación de todo un
> pueblo, labor ineludible de un régimen político de
> izquierdas. Veo que poco ha hecho el régimen castrista en
> ese campo, ante el rechazo social a unos enfermos
> determinados, mas parecido al miedo medieval a la lepra.
Ahí sí que carezco de datos. No sé si el pueblo cubano
practica un rechazo activo a los enfermos de sida. ¿Podrías
ampliar el asunto?
Saludos
JM